enfoquemos
sábado, 5 de febrero de 2011
Ni siquiera el agua, contaminada de otras aguas, inventó un reflejo cualquiera que me devolviera mi boca o mi tristeza.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Entrada más reciente
Entrada antigua
Inicio
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario